Kaili Blues (Bi Gan, 2015) llama la atención por su plano secuencia de 41 minutos. La secuencia, el viaje de Chen, el protagonista, en busca de su sobrino, es un delirio febril donde se mezclan presente, pasado y futuro, y donde sus propias vivencias se confunden con las de las historias ajenas. Ese sueño febril […]